A pesar del calor, la falta de arboles y la imposibilidad de bañarnos en el río Tajo conseguimos nuestro huequito de sombra donde incluso montamos el chinchorro, que ya es casi tradición del clan!.
Aunque no tantos como los que quisiéramos, hicimos bastantes talleres y actividades interesantes como el taller del horno holandés, que nos brindó una excelente cena en compañía de la red que también hizo un taller de cocina en el campo.
Otro taller que fue todo un éxito considerando la falta de palos y de luz fue el taller de catapultas donde, basados en la idea original implementada en el Eurocamp, recreamos una maqueta de tamaño medio totalmente funcional .
Y no puede faltar en cualquier acampada que se precie un buen raid que aún con las pequeñas dificultades que tuvo para salir adelante fue todo un éxito y ayudo al clan a formarse un poco más en orientación.
Por otra parte llegó uno de los momentos más importantes en la vida de un rover: su partida rover.
3 de nuestros rovers más veteranos se enfrentaron a una decisión muy dura, si continuar como jefes en el grupo o seguir su camino fuera del clan. A pesar de las dificultades que esto conlleva, nuestros 3 rovers hicieron la decisión adecuada, y así el grupo obtuvo 2 nuevos jefes y despidió con un fuerte abrazo al tercero, a la espera de lo que esperamos sea un tiempo prudencial hasta su regreso, donde le estaremos esperando con los brazos bien abiertos.
En resumidas cuentas fue una acampada bastante completa con sus momentos felices y tristes pero en definitiva sirvió para lo que estaba planeado, formar al clan en distintos aspectos y divertirse en el campo que es algo que nos viene muy bien a todos.
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